Las conchas de los caracoles terrestres reflejan las oscilaciones estacionales e incluso diarias de precipitación y temperatura
La ciencia sabe desde hace tiempo que los anillos de crecimiento de los árboles registran información climática de su entorno, de tal manera que permiten fechar y analizar la frecuencia de determinados acontecimientos ambientales, como incendios, tormentas, plagas, sequías… Ahora, un nuevo estudio ha mostrado que también hay unos animales que informan sobre los cambios climáticos y meteorológicos, los actuales y los pasados, incluso de los registrados hace millones de años. Son los caracoles terrestres.
Investigadores del Instituto de Medio Ambiente Terrestre de la Academia China de Ciencias y la Universidad del Noroeste han demostrado que los caracoles terrestres son muy sensibles a los cambios climáticos y ambientales, y a través de ellos se pueden registrar los cambios en el clima terrestre en alta resolución. Todo queda registrado en sus conchas.
Los autores del estudio, que se ha publicado en ‘Geophysical Research Letters’, realizaron análisis de isótopos de oxígeno de alta resolución dentro de las conchas de caracoles Cathaica fasciola y Bradybaena ravida y obtuvieron una enorme cantidad de datos.